jueves, 1 de febrero de 2007

La Frontera

Un pobre senegalés, negro como  el tizón, consigue llegar a la frontera  de Ceuta con un pasaporte que le vendieron  en Marrakech por bueno y por supuesto, más falso que Judas. Tanto que lleva una foto de Leonardo DiCaprio  
  
Se lo enseña al Guardia Civil de la frontera y éste,  que es cualquier cosa menos tonto, se queda mirando alternativamente  la foto  y  al senegalés durante cinco minutos, mientras se rasca la cabeza por  debajo de la gorra.

Como saliendo de un letargo, le  dice al pobre hombre, que ya temblaba como una hoja, que espere un momento, mientras se mete en la oficina  que está justo al lado.
  
Cuando entra dice:  
 
- "Perdón, mi sargento! Uzte que tiene más estudios y está más  viajao.

¿El Titanic se hundió, o se  quemó?"


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